My girl

Preciosísima canción que Jack Jezzro me canta al oído con su saxo, caricia de mi corazón y alegría de mi alma en un día más que especial y que ya declina. Sí, "Mi chica" ha venido a verme antes de partir definitivamente junto a su querido amor verdadero. Se va de casa la niña, sí, se va ya. El amor no sólo mueve el mundo, sino que impulsa a que una preciosa mujer de ojazos grandes y verdes -aunque miopes- abandone su querida ciudad, su familia y amigos para formar su propio hogar en otro país.
Como un regalo de Dios llegó a mi vida hace ya casi dos años, era una más de las chicas jóvenes que venían buscando ayuda; nos conocimos, hablamos un buen rato y desde el minuto cero ya habíamos conectado las dos. Alegre, jovial, guapísima por fuera y aún más guapa por dentro, con un ansia por vivir y ser feliz como he visto pocas veces, me contagió sus ganas de amar y de crecer en la vida.
Y comenzamos a trabajar en su tema privado y particular, y así nos fuimos conociendo poco a poco. Después de unos meses, volvimos a encontrarnos en persona y con ella venía su madre, otro cascabel (¡dichosa la rama que al tronco sale!) y las tres terminamos amigas. Nos intercambiamos teléfonos y lo demás ya forma parte de nuestra historia común.
Somos amigas en la distancia, con un mar de por medio y dos cordilleras bien hermosas, pero nada que no subsane el whatsapp o el facebook; estamos las dos al día de lo que hace, vive y siente la otra. Antes de las vacaciones estivales vino por mi ciudad y quedamos para comer; también venía su madre con ella. Pasamos una comida realmente divertida, muchas risas, mucho cariño y, como por "casualidades del destino" su madre y yo somos de la misma quinta, el empaste de caracteres y de ilusiones por la vida y por el futuro que vemos y deseamos para "la niña" fue instantáneo.
Hoy ha venido para comer conmigo "mi niña", toda guapísima, más delgada pero con más ilusión y más ganas por vivir de las que le he visto nunca. El rato ha pasado en un santiamén, hemos hablado de ella y sus planes de futuro con su novio, de mí y de mis planes de futuro, que también los tengo, y, sobre todo, de lo que tenemos en común y de lo que nos queremos las dos. Hasta ha conseguido que le prometa una visita a su nueva casa en no mucho tiempo, aunque ya hemos quedado para vernos esta Navidad, cuando venga por aquí para ver a la familia, serán pocos días y habrá que aprovechar bien el tiempo que pasemos juntas.
Mi niña... No he tenido hijos biológicos, como se dice ahora, pero Dios me regala otros hijos, ya creciditos, que también necesitan que yo los mime y les ayude a seguir adelante, a crecer por dentro y a descubrir que tienen un Padre en el cielo que les ama y les cuida, que les ayuda más de lo que ellos se imaginan y que jamás los dejará solos. ¡Bendita vida mía, llena de hijos regalados por Dios!
Hoy se me va mi niña, se va a ejercer de la mujer de bandera que está hecha. Si Dios quiere, será una novia preciosa el día de mañana, la pienso ver y también llorar como una madre cuando vea a "mi niña" caminando hacia el altar, para entregarse al hombre de su vida. ¡Mas te vale cuidarla, chico!

Comentarios

Entradas populares